Un monstruo que ataca y no desaparece

La esperanza de despertar con vida y dejar atrás los negros días

La pesadilla del cáncer, una enfermedad que ataca de forma letal, no perdona edad, género, color, bueno o mal obrador de la vida, llega silenciosamente y pocos soportan la batalla que se da en su contra, genera un dolor a quien lo padece e impotencia a quienes están cerca del enfermo.

El cáncer de la soledad, nadie se acerca, nadie ayuda o alivia a calmar el dolor de quien lo padece, una habitación repleta de la triste, amarga y negra frialdad, que con los días los dolores consumen a la persona y generan desgaste físico.

Luz Buitrago, una paciente con cáncer, despierta todos los días con energía y agradecida a Dios por su vida, hace dos años fue operada en la Clínica Cardioinfantil, para extraer una masa cancerígena en su corazón, las expectativas después de la intervención quirúrgica fueron de un 70%, rápidamente volvió a sentirse viva, a pesar de las duras quimioterapias, a las cuales se debía someter, lucho sin queja alguna, al año de ser operada, empezó a recuperar su cabello y a sentir de nuevo energía en su cuerpo, la ilusión latente en ella y en su familia, llenaban de regocijo, cada reunión, cada momento compartido.

Enero 2017

Debido a un gran desaliento, Luz Buitrago volvió a la Clínica Cardioinfantil, allí debido a sus antecedentes de salud, se vieron obligados a realizar de nuevo estudios y exámenes acerca de esta horrible enfermedad, es así como de nuevo la pesadilla, la angustia y el estrés volvió a ella, también a su familia, destrozando su ilusión de victoria, derrumbando aquellos sueños, frustrando su ánimo y energía, dejando un vacío en su interior, ya que el dolor se apodera más al pensar en sus cuatro nietos, quienes muchas veces se quedan con ella, para que sus hijos puedan salir a trabajar, Thiago, uno de sus nietos, se acerca a ella con voz amorosa. “No llores, yo te quiero mucho y te voy a cuidar”, su llanto es inevitable y ya que el resultado de sus exámenes arroja una falta metástasis en un pulmón, el cáncer ha vuelto y de nuevo silencioso, sin dar oportunidad de salir corriendo y escapar, ella sigue en su lucha, sin dar un paso atrás, pero su dolor sigue, aunque afortunadamente su dolor no se ha manifestado.

La última esperanza

Como le decimos cuando agotamos todas las oportunidades, la última esperanza dicen los doctores, que puede tener, es de nuevo realizar un intervención quirúrgica para extraer una masa que se encuentra cerca al corazón de Luz, y si se logra con éxito, su calidad de vida puede mejorar y vivir más tiempo con sus nietos y familia, sin embargo, hay otra cruda y gris desesperanza y es que esta opción se encuentra sujeta a otro examen, y si el resultado es negativo, solo habría que esperar a que el monstruo del cáncer se lleve lentamente todos sus sueños, esperanza y amor, su familia ora y suplica a Dios otra oportunidad para seguir conservando a Luz con energía.

#cancer